Fue ese chico ciego. En esa parada de autobús. Ese caluroso día en Madrid. No podía apartar mis ojos de él, y de cómo su mano acariciaba sin descanso el pelo de la chica ciega que estaba a su lado, mientras esperaban el autobús.
[25 Octubre 2006]
La vida. La Física. Las cosas que se pueden tocar y las que no. La velocidad de la luz. La gente con la que te quedas. Un día descubres que todo es relativo. Y que además se puede escribir sobre ello.
Fue ese chico ciego. En esa parada de autobús. Ese caluroso día en Madrid. No podía apartar mis ojos de él, y de cómo su mano acariciaba sin descanso el pelo de la chica ciega que estaba a su lado, mientras esperaban el autobús.
[25 Octubre 2006]
5 comentarios:
Muy buen post, si senhora, jeje. Que sepas que te sigo leyendo aunque este lejos, jaja.
Quizas para ese chico sea suficiente con los sentidos que tiene. Probablemente, vamos, seguro que el disfruta mas con una caricia que lo que nosotros podriamos nunca disfrutar... Por eso es bueno cerrar los ojos de vez en cuando y hacernos los ciegos, para que el sentido del tacto nos domine y podamos experimentar el mundo de otra forma... jeje
Muy bueno Isa Records... mi producción literaria esta estancadisima, ya me dira que fumas tu. ;)
Nos vemos en Zacut!!
Muy bueno Isa Records... mi producción literaria esta estancadisima, ya me dira que fumas tu. ;)
Nos vemos en Zacut!!
bonito isa, muy bonito, de verdad :)
Jué, asias.
Lo malo es que es mi post con menos mérito... sucedió tal cual. Les vi en una parada de autobús en Madrid el verano pasado. Eran varios chicos ciegos, ninguno pasaba los 17 años, con dos voluntarias, esperando el bus.
Os juro que en los a lo mejor diez minutos que tardó en venir el bus él no dejó de acariciar su pelo.
Pablo, te debo mail pero me alegra saber de ti en el blog. MaviRecords estudieme, yo he tendio hoy el día menos productivo de la temporada. Ali, qué bueno oir de ti, ganas de verte ya.
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